La Justicia de Dinamarca prolonga hasta el 2 de octubre la decisión sobre si extradita a Japón al activista
Ballenas, una autopista y un bote de sopa: la mano dura se aprieta sobre los activistas ambientales
El activista antiballeneros, Paul Watson, seguirá, al menos, un mes más en prisión a la espera de saber si es extraditado desde Groenlandia a Japón.
El tribunal danés que revisaba su caso este miércoles ha decidido prolongar su detención hasta el 2 de octubre mientras “busca más evidencias”, según ha informado la organización fundada por el ecologista, Fundación Captain Paul Watson.
Los abogados de Watson van a recurrir la decisión porque, aducen, “no hay evidencias suficientes para mantenerlo encerrado”. También se han quejado de que mientras la Corte ha podido revisar las imágenes de vídeo presentadas por Japón, mientras “nuestro metraje no ha sido admitido aún en el procedimiento”.
Watson fue arrestado al atracar su barco en Nuuk, en Groenlandia, el pasado 21 de julio por una orden de captura de Japón remitida a la Interpol. El país asiático le acusa de asalto a un barco ballenero nipón en 2010 mientras cazaba ballenas en el Antártico. Los cargos que le imputa pueden llegar a suponer pena de cárcel de hasta 15 años.
Al ser Groenlandia un territorio autónomo del estado de Dinamarca, es el país nórdico quien debe tramitar la solicitud de extradición. El presidente de Francia, Emmanuel Macron (país donde reside Watson) ha solicitado la liberación de activista.