trabajaba a principios de 2014 en el Banco de Pagos Internacionales de Basilea. Antes había pasado por el BBVA y había sido jefe de la División de Política Monetaria del Banco Central Europeo. Un currículum que le pareció adecuado al Gobierno de Mariano Rajoy en aquel momento para proponerlo, en febrero de ese año, como presidente de la recién creada Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal), un órgano independiente pensado para garantizar la estabilidad presupuestaria. El PP, que defendió entonces su idoneidad, cree ahora que el nuevo presidente del Banco de España causará “desprestigio” a la institución.