El Gobierno venezolano ha decidido llamar a consultas a la embajadora en Madrid, Gladys Gutiérrez, tras unas declaraciones de la ministra de Defensa, Margarita Robles, en las que calificaba de «dictadura» a Venezuela y que el canciller venezolano ha calificado de «injerencistas»
Venezuela cita al embajador de España en Caracas y llama a consultas a su representante en Madrid
El ministro de Asuntos Exteriores de Venezuela, Yván Gil, ha llamado a consultas a la embajadora de Venezuela en España este jueves por la noche, tras las palabras de la ministra de Defensa española, Margarita Robles, quien en la presentación de la novela de Julia Navarro ‘El niño que perdió la guerra’, este jueves en el Ateneo de Madrid, se refirió “a los hombres y mujeres de Venezuela que han tenido que salir de su país, precisamente por la dictadura que viven”.
¿Qué significa ‘llamar a consultas’?
El Diccionario Panhispánico del español jurídico explica que una llamada a consultas es una orden que se envía a un jefe de misión diplomática por el ministro de Asuntos Exteriores del Estado acreditante para que se persone urgentemente con objeto de informar sobre un determinado asunto y recibir instrucciones particulares.
Así, la máxima representante de la diplomacia venezolana en España deberá regresar a Caracas inmediatamente tras ser convocada por su ministerio. La ausencia puede durar días, meses o años.
Durante la ausencia del embajador, al frente de la embajada quedaría el encargado de negocios ad interim, un funcionario diplomático que sustituiría provisionalmente al jefe de la misión. Por lo tanto, bajaría la representación diplomática.
De esta forma, cuando un país llama a consultas a su embajador, puede ser el paso previo a una ruptura de relaciones diplomáticas.
El Gobierno venezolano ha decidido llamar a consultas a la embajadora Gladys Gutiérrez tras las declaraciones de Robles, que el canciller venezolano, Yvan Gil, calificó de “groseras” e “injerencistas”.
La convocatoria a un embajador extranjero
Además, el embajador español en Caracas, Ramón Santos Martínez, ha sido citado a comparecer en el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano este viernes 13 de septiembre.
Esta decisión se produce en medio de una creciente tensión entre ambos países, agudizadas tras la proposición no de ley aprobada este miércoles por el Congreso de los Diputados, con los votos de la derecha, en la que se insta al Gobierno a reconocer al líder opositor Edmundo González Urrutia como “presidente electo y legítimo” de Venezuela.
La convocatoria de un embajador, como ha hecho ahora Venezuela con el de España en Caracas, se produce cuando el Ministerio de Asuntos Exteriores correspondiente hace ir físicamente a su sede a un embajador de otro país para expresar una queja.
Cuando los embajadores acuden al ministerio, se les puede transmitir la queja de forma verbal o a través de un documento (conocido como ‘nota verbal’), entre otras fórmulas.
Grados en relaciones diplomáticas
Existen distintos grados de ‘anomalía’ en las relaciones diplomáticas como la convocatoria, la llamada a consultas y la retirada de credenciales. Estos conceptos reflejan situaciones bastante distintas.
En la escala de medidas de protesta diplomática, la llamada a consultas está un nivel por debajo de la retirada definitiva del embajador y la ruptura de relaciones diplomáticas.