El Govern de Illa pone en marcha un nuevo protocolo tras el asesinato el pasado mes de marzo de una cocinera en la prisión de Mas d’Enric, en El Catllar (Tarragona)
Los presos involucrados en delitos extremadamente violentos, como asesinatos o lesiones graves, no podrán trabajar en las cocinas de las cárceles de Catalunya ni en talleres donde tengan que manejar instrumentos peligrosos, según el nuevo protocolo que ha puesto en marcha el Govern de Salvador Illa.
En declaraciones a EFE, el conseller de Justicia, Ramon Espadaler, ha explicado que se han revisado las circulares que regulan el acceso de los reclusos a puestos de trabajo en los recintos penitenciarios para incorporar la nueva medida, que veta el acceso a las cocinas de los presos con delitos de sangre, tanto penados como preventivos.
El acceso de los internos a trabajos que impliquen manejo de instrumentos peligrosos estaba en revisión desde el pasado de mes de marzo, cuando una cocinera de la cárcel Mas d’Enric, en El Catllar (Tarragona) y que cumplía condena por asesinato.