SpaceX ha vuelto a hacer historia con el , la nave diseñada para llevar a la humanidad de regreso a la Luna y, posteriormente, a Marte. El objetivo era capturar en el aire al Super Heavy B12 –la primera etapa del lanzador– y aterrizarlo de vuelta en la plataforma de lanzamiento. Algo que no pasa ni en las películas de ciencia ficción.