El juez pregunta al Congreso si Errejón ha dejado el acta y puede investigarle por la denuncia de agresión sexual

El juzgado número 47 de Madrid se dirige a la cámara baja para que confirme que el exportavoz de Sumar ya no es diputado y, por tanto, ya no está aforado ante el Tribunal Supremo tras la denuncia de Elisa Mouliaá

La actriz Elisa Mouliaá relata una agresión sexual en su denuncia contra Íñigo Errejón

Un juzgado de Madrid ha dado el primer paso para investigar a Iñigo Errejón después de que la actriz Elisa Mouliaá presentase una denuncia contra él en por una agresión sexual. El magistrado del juzgado 47 de Madrid se ha dirigido por escrito al Congreso de los Diputados pasra que la cámara baja confirme que Errejón ya no es diputado y que, por tanto, no está aforado ante el Tribunal Supremo y puede ser investigado por un juzgado ordinario. El movimiento del magistrado llega después de que la Brigada de Policía Judicial remitiera el testimonio de la afectada al juzgado número 47 de la Plaza de Castilla de Madrid.

Fuentes del Congreso explican a elDiario.es que la cámara contestará este mismo lunes al magistado, comunicando que el exportavoz de Sumar ya no es parlamentario y que, por tanto, ha perdido su aforamiento. Una vez reciba la respuesta, el juez se declarará competente y decidirá si abre o no un proceso penal contra Iñigo Errejón por delitos sexuales. El expolítico dejó su acta de forma efectiva el pasado jueves.

La denuncia relata que ambos coincidieron en una fiesta en septiembre de 2021 pocas horas después de conocerse en persona. Mouliaá afirma que el político la cogió “fuertemente” del brazo para llevarla “por la fuerza” hasta una habitación cuya puerta cerró con pestillo “para que no pudiese escapar”. Errejón, según la denuncia, empezó a “besar y tocar” a la mujer hasta que “la empujó sobre la cama y se sacó su miembro viril”. Todo ocurrió, añadió, sin su consentimiento y mientras estaba “paralizada”.

El testimonio de esta actriz y presentadora se conoció pocas horas después de que Iñigo Errejón anunciara su dimisión de todos sus cargos públicos y políticos. En un comunicado, el ya exdiputado y portavoz de Sumar en el Congreso no hacía alusión directa a ninguna acusación por actitudes machistas o violencia sexual y afirmaba haber llegado “al límite” de “la contradicción entre el personaje y la persona”.

En los últimos días han aflorado diversos testimonios de mujeres que acusan al ya expolítico: “Todo iba de sus ansias de dominar”, explicó a elDiario.es una mujer que mantuvo una relación de algo más de un año con Errejón. Desde Sumar, el partido cuya portavocía parlamentaria ostentó hasta hace unos días, han admitido fallos de “detección y prevención” en su caso y han pedido disculpas, anunciando también “protocolos de prevención y abordaje de situaciones de acoso y agresiones sexuales”.

Más Madrid niega haber conocido los hechos

Este lunes la ministra y líder de Más Madrid, Mónica García, ha comparecido junto con Manuela Bergerot y Rita Maestre para defender la actuación de su formación política. El partido, ha afirmado, “no ha recibido ninguna denuncia ni ningún testimonio concreto ni presentes ni pasados contra Ejrreón. Tampoco ha tenido ni tiene conocimiento de episodios similares a los que se viene denunciando en los últimos días”.

Desde el partido se ha señalado a la ya exdiputada regional Loreto Arenillas por, supuestamente, haber intentado tapar una denuncia publicada hace más de un año en la red social X en la que se acusaba a Errejón de haber tocado el culo a una mujer en una discoteca de Castellón. Rita Maestre ha afirmado que Arenillas actuó “a espaldas de la organización, de la ejecutiva y del partido”, algo que Arenillas ha negado minutos después.

La posible causa judicial contra Errejón por la denuncia de Elisa Mouliaá está todavía pendiente de varios trámties antes de la apertura formal de un procedimiento penal: que el Congreso conteste, que el juez se declare competente y que después decida que hay indicios suficientes para abrir una causa. En caso de hacerlo así, uno de sus primeros movimientos será solicitar a la víctima que ratifique sus acusaciones.

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