El inspector jefe en excedencia José Angel Fuentes Gago declara como investigado y niega haber maniobrado contra la formación política y el comisario Eugenio Pino se niega a contestar porque ya lo hizo en el caso Dina y ante el Congreso
El “mandato” de Rajoy a la brigada política y otros tres episodios de la guerra sucia a Podemos que investiga Pedraz
La investigación de la Audiencia Nacional por la guerra sucia contra Podemos durante el Gobierno del Partido Popular contó este martes con la declaración de dos destacados miembros de la brigada política: su jefe, el comisario jubilado Eugenio Pino, y el inspector jefe José Ángel Fuentes Gago. Según fuentes jurídicas, este último ha asegurado ante el juez Santiago Pedraz que no reconoce su voz en la grabación de su encuentro con un ex ministro de Hugo Chávez en Nueva York en la que aparece diciendo que ha viajado con un “mandato” del entonces presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, para evitar que Podemos llegue al Gobierno.
Fuentes Gago ha declarado como investigado y ha respondido únicamente a su abogado. El mando, ahora en situación de excedencia en la Policía, ha dicho que no espió a ningún partido ni a ningún miembro de formaciones políticas. Y que tampoco conoce a ningún compañero del Cuerpo que lo haya hecho.
El inspector jefe José Ángel Fuentes Gago, uno de los miembros de la primera línea de la brigada política del PP, viajó a Nueva York para reunirse con el ex ministro venezolano Rafael Isea. En una grabación publicada en el digital moncloa.com, aparece Fuentes Gago dirigéndose al antiguo responsable chavista: “Si nos ayuda a que no lleguen los de Podemos, mejor para todos”. Se trataba de que Isea avalara la autenticidad de un documento sobre un supuesto pago de 7,1 millones de euros, en 2008, del Gobierno de Venezuela a la Fundación CEPS, ligada a los inicios del partido de Pablo Iglesias.
Ante el juez, Fuentes Gago ha esgrimido que en el momento en el que se produjo el encuentro con Isea en Nueva York, en 2016, él ya había sido enviado a un destino en Países Bajos. El comisario Pino lo había enviado de agregado de Interior a La Haya para que se embolsara cerca de 15.000 euros brutos mensuales, los mismos que su mujer, a la que el director operativo destinó en la misma ciudad unos meses antes. A pesar de ello, Pino seguía contando con él, vía pago de dietas, para encargos como el viaje a Nueva York en la misión extrajudicial contra Podemos
El jefe interino de la UDEF en ese momento viajó con Gago y otra policía y, a su regreso de Nueva York, redactó un atestado que no se incorporó a investigación judicial alguna. Años después, Rafael Isea hizo unas declaraciones en las que aseguró que el documento que le dieron para visar era una fotocopia. Aquel jefe interino de la UDEF, José Manuel García Catalán, declarará como testigo a petición de Podemos, aunque el juez Pedraz aún no ha acordado la fecha.
Pino no declara
Por su parte, Eugenio Pino se ha negado a prestar declaración en la Audiencia Nacional. Ha argumentado que las cuestiones por las que piensa que se le iba a interrogar ya las contestó en el marco de la pieza Dina, del caso Villarejo, y en sus tres comparecencias ante las comisiones de investigación del Congreso de los Diputados.
El lunes prestó declaración, también como investigado, el que fuera secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, quien negó ninguna investigación contra Podemos. Martínez realizó esta afirmación en sede judicial pese a estar incorporados a la causa una serie de mensajes intercambiados con el comisario Enrique García Castaño en los que el entonces número dos de Interior dice al comisario: “Aquellos de Podemos que tenían antecedentes, ¿pudiste confirmar algo?” El comisario Enrique García Castaño le contestó que “nada”. “¡Cagüenlaputa!”, exclamó Martínez.