El alcalde aseguró en julio que había emitido el doble de procedimientos en apenas tres meses. Su delegado de Urbanismo, además, cifro en «casi 500» las VUT que se habían pasado al residencial gracias a su campaña de multas, pero la cifra en todo este 2024 es de 221
Los pisos turísticos aumentan en Madrid pese al parón de licencias y a las multas de Almeida: 1.153 anuncios más en Airbnb
El Ayuntamiento de Madrid ha sobreactuado en los datos ofrecidos sobre su campaña de multas a pisos turísticos ilegales. El último informe de la Agencia de Actividades revela que el número de sanciones recibidas por los propietarios de Viviendas de Uso Turístico (VUT) sin licencia municipal para ejercer esta actividad es mucho menor al que hasta ahora había indicado el Gobierno de Almeida.
El alcalde aseguró el pasado mes de julio: “Hemos impuesto más de 170 sanciones por valor de 30.000 euros” desde el mes de abril, una cifra que su equipo luego concretó en 176. Sin embargo, el citado informe de gestión municipal, al que ha tenido acceso este periódico, solo recoge 69 procedimientos sancionadores en los nueve primeros meses del año para este tipo de negocios turísticos “por la implantación y desarrollo de un uso urbanístico incompatible con la ordenación”.
Del total de multas impuestas, solo en 16 casos las empresas denunciadas decidieron acogerse a las reducciones previstas para el pronto pago (de entre el 20% y el 40%), por lo que es probable que buena parte del resto haya recurrido las sanciones y estas aún no sean firmes. El total del dinero reclamado por el consistorio asciende a 1.890.063 euros, según el citado informe.
Las sanciones de 30.001 euros son las primeras de un rango de multas que se ha elevado en Madrid desde la pasada primavera, cuando el equipo de Almeida decidió subir su cuantía notablemente para intentar desincentivar la apertura de pisos turísticos ilegales, que cifró en más de 12.000 inmuebles. Antes se imponían sanciones de 1.000, 2.000 y 3.000 euros, procedimientos que se han seguido tramitando a través de la Agencia de Actividades (ADA) y que en lo que va de este año han llegado a otras 51 VUT.
Menos VUT cerradas de lo anunciado
Aunque el Ayuntamiento de Madrid tramita actualmente una ley para que sea más fácil reducir el número de pisos turísticos sin licencia, de momento sus esfuerzos se están centrando en cerrar los existentes, enviando el mensaje a los propietarios de VUT piratas que hay “tolerancia es cero con este tipo de pisos ilegales”, decía Almeida el pasado verano. “Lo hemos demostrado tramitando ya todos esos expedientes e imponiendo esas más de ciento setenta sanciones (…). Hay que poner coto ya a la ilegalidad en la ciudad”.
El mensaje lo reforzó en agosto el propio delegado de Urbanismo, responsable de la Agencia de Actividades y de las campañas de inspección, asegurando que gracias a las medidas adoptadas habían cerrado “casi 500” VUT en los últimos 18 meses. Lo cierto es que esta cifra parece alejada de la realidad, porque después de las multas y las campañas de inspección llevadas a cabo, el propio Ayuntamiento reconoce que son 221 viviendas turísticas ilegales en este año las que han vuelto a la actividad residencial después de que sus propietarios recibieran la amenaza de multa por parte del consistorio, que da un primer aviso antes de iniciar los trámites para imponer multas económicas.
Lo que sí que ha aumentado en este periodo de enero a septiembre han sido las denuncias que están llegando contra los pisos turísticos, tanto desde los vecinos (692 frente a las 431 del mismo tramo del año 2023) como desde la Policía Municipal y otras áreas del consistorio (251 frente a 83). Después de estas quejas, el cuerpo de inspectores de la Agencia detectó 448 VUT, la mayoría ilegales.
Fruto de esta acción se han abierto 289 expedientes que afectan a 312 viviendas. En paralelo, estos equipos han ordenado el cese de 356 viviendas de uso turístico, algunas de ellas con expedientes abiertos desde el año pasado.
Más anuncios en Airbnb pese a la moratoria
A la vez que aumentaba la cuantía de las multas, el Ayuntamiento de Madrid decretó un parón en la concesión de licencias para VUT. Lo hizo mientras tramitaba una nueva normativa que impedirá su apertura en comunidades de propietarios con residentes a largo plazo. Su intención es aprobarla inicialmente en dos semanas y que pueda entrar en vigor de forma definitiva antes del verano.
Pero la moratoria y las multas no parecen estar intimidando a parte de los propietarios que están poniendo en alquiler pisos turísticos sin licencia: desde el mes de abril hay un millar de anuncios de apartamentos más en Airbnb, pese a que su número no puede haber aumentado legalmente.
Desde Más Madrid, que asistió este miércoles a la reunión del Consejo Rector del ADA, indican que la cifra de 69 multas es inferior a las que se impusieron el año pasado, pese a que el equipo de Gobierno “nos aseguró que había reforzado el servicio de inspección en diez personas más”. Su concejal José Luis Nieto añade, en declaraciones a este periódico: “Sabemos de que todo lo que vende Almeida es humo, pero no por ello hemos dejado de escandalizarnos al descubrir que este gobierno miente más que habla y que sus medidas y sanciones son fake”. “¿De dónde saca entonces Almeida los datos de que el Ayuntamiento ha impuesto 176 multas entre abril y julio de este año, cuando no llegan ni a 70?”, añade.
Nieto explica que “el propio informe de la Agencia de Actividades de enero a septiembre de este año ha destapado las mentiras del gobierno municipal sobre su política con las VUT y añade que ”Almeida habría conseguido solamente que dejaran de ejercer de manera ilegal 197 VUT, a pesar de que las denuncias registradas no han parado de crecer: de 514 en 2023 a 943 en 2024“, por lo que exige ”explicaciones inmediatas del alcalde y del delegado de Urbanismo, que nos han mentido sin la menor vergüenza, a nosotros y a toda la ciudadanía“.