Ante el permanente , el PP parece dispuesto esta vez a ir un paso más allá de su eterna crítica para intentar pescar. Después del último órdago del líder de Junts, Carles Puigdemont, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de que la derecha catalana sumara sus votos a los del PP para intentar asestarle un golpe al Ejecutivo con la , Alberto Núñez Feijóo ha aprovechado la sesión de control de este miércoles para lanzarle al independentismo catalán un gesto cómplice en mitad de su choque con el jefe del Ejecutivo.