El ministro de Derechos Sociales y Consumo pide a la Comisión Europea que los expedientes contra las grandes plataformas «lleguen a término» y que se solventen las «lagunas» de la legislación digital: «La democracia en Europa no puede estar subordinada a los intereses de ninguna gran empresa ni de ningún magnate»
La UE arrastra los pies ante el desafío de Musk y Zuckerberg en plena ebullición de la ultraderecha
Cada vez son más los gobiernos europeos que elevan la voz de alarma por el temor a que Elon Musk -y ahora también Mark Zuckerberg- utilicen sus plataformas digitales con fines políticos. Pedro Sánchez o Emmanuel Macron han pedido que Europa reaccione ante esa situación después de que el dueño de X haya hecho campaña por los ultras de Alternativa por Alemania ante las elecciones del próximo 23 de febrero y el mensaje se lo ha llevado en persona el ministro de Derechos Sociales y Consumo, Pablo Bustinduy, a la Comisión Europea, a la que ha pedido que actúe para evitar que Musk siga “jugando al Risk con las democracias europeas”.
“He tenido ocasión de comentar la enorme preocupación que sentimos por la deriva de inestabilidad que recorre las democracias europeas a menudo asociadas al hecho de que las grandes redes sociales se están convirtiendo en armas políticas para desestabilizar las democracias europeas y, en ocasiones, para servir abiertamente a opciones políticas antidemocráticas”, ha dicho Bustinduy a los periodistas en Bruselas tras reunirse con varios comisarios, entre ellos el nuevo responsable de Justicia, Estado de Derecho y Protección de los Consumidores, Michael McGrath.
“La soberanía digital de Europa es tan importante como su soberanía territorial y la democracia europea no puede estar supeditada a los intereses de ningún magnate, sea Elon Musk, sea Zuckerberg, o sea cualquier otra gran empresa tecnológica. Es absolutamente esencial que Europa reaccione para defender sus instituciones y su democracia”, ha agregado Bustinduy que se ha referido a la aplicación de la ley de servicios digitales (DSA) para poner coto a las grandes plataformas.
“Necesitamos poder aplicar las normas y las regulaciones que tenemos y, por tanto, es fundamental que los expedientes en marcha vean la luz y lleguen a término”, ha dicho en referencia a las investigaciones que la Comisión Europea ha puesto en marcha en el último en año que afectan a X, Meta o Tik Tok por incumplir las nuevas normas digitales de la UE en asuntos como la lucha contra la desinformación. La advertencia no es baladí en un momento en el que Financial Times ha publicado que Bruselas está revisando los procedimientos contra X, Meta o Google con la intención de reducir su alcance ante la presión que están ejerciendo aprovechando la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. La Comisión Europea, no obstante, niega que se estén reevaluando a la baja esos procedimientos y asegura que sigue su proceso técnico.
“Lo que se me ha transmitido es que la Comisión Europea se toma este desafío muy en serio y (…) que va a seguir actuando en esa línea”, ha apuntado Bustinduy tras sus reuniones. Pero sí ha reclamado más energía política al gobierno comunitario en línea con lo que están emitiendo algunas capitales. “No basta con escandalizarse, creo que no basta sencillamente con denunciar estos comportamientos, hay que reaccionar y creo que hay que reaccionar regulando nuestra esfera digital”, ha señalado.
Además de proseguir con los procedimientos ya abiertos, Bustindy ha reconocido que la actual regulación digital tiene “lagunas” que ha pedido solventar: “Se han producido toda una serie de prácticas, se han normalizado una serie de prácticas, también prácticas comerciales, que explotan las lagunas de regulación o la falta de capacidad de llevar a cabo un enforcement de esa regulación. Y, por tanto, hay que seguir trabajando desde los poderes públicos a todos los niveles”.
“Estamos ante una gran llamada de atención para que las democracias europeas reaccionen y se tomen este problema en serio, porque no puede ser que la democracia en Europa esté supeditada o subordinada a los intereses de ninguna gran empresa ni de ningún magnate”, ha reiterado el ministro de Sumar, que ha pedido reforzar el pilar social para “defender la democracia”: “Solo a través de la ampliación de derechos sociales y de la prosperidad compartida del Estado del bienestar las democracias europeas podrán afrontar las grandes amenazas que enfrentan en este tiempo de inestabilidad”.