La formación plantea impedir por ley el cobro de comisiones de familiares de altos cargos por mediar con la Administración y auditar las concesiones al grupo sanitario privado
La investigación de los contratos de la FP que salpica al Gobierno de Ayuso se extiende a otros dos institutos
La vuelta al trabajo en la Asamblea de Madrid —el parón navideño se extiende hasta febrero en el legislativo regional— viene precedida por las reuniones de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, con los portavoces de los respectivos grupos parlamentarios para abordar los temas de interés del nuevo año. Son encuentros sin la tensión palpable de los intercambios de las sesiones de control, pero en los que se suele evidenciar la imposibilidad de acercamientos entre las posturas del PP y la oposición de izquierdas.
En el caso de Más Madrid, cuya portavoz, Manuela Bergerot, se reúne esta mañana con la presidenta regional —ayer lo hizo el del PSOE, Jesús Celada— las propuestas abordan aquello que Ayuso lleva casi un año tratando de soslayar: los puntos oscuros de la relación entre el Gobierno regional y la sanidad privada, con alusión a la situación de la propia pareja de la presidenta, investigada por fraude fiscal y a quien la Fiscalía ve sospechoso de soborno por el cobro de comisiones en el negocio sanitario.
De las cuatro propuestas que lleva Bergerot a Ayuso, la primera pasa por elaborar una ley para “impedir el cobro por servicios de intermediación de familiares de altos cargos de la Comunidad de Madrid en operaciones comerciales o financieras con administraciones dependientes del Gobierno madrileño”.
El partido de izquierdas precisa que por “servicios de intermediación” se refiere a “comisiones o mordidas”. En la misma línea va una propuesta para auditar en la Cámara de Cuentas los contratos de concesión sanitaria a los hospitales privados, con especial foco en los de Quirón. “En particular, revisar las modificaciones de precios por servicios para detectar y reducir cualquier cambio arbitrario”, especifica la propuesta.
Las otras dos proposiciones son de fondo y explicitan que los modelos sanitarios del PP y Más Madrid son absolutamente contrarios. En primer lugar, reducir la inversión en los centros privados para dedicarla a la sanidad pública y, además, aumentar en 3.000 millonres de euros la inversión anual en atención primaria hasta 2027 para igualar llevar el gasto por paciente a 1.944 euros al año.
“Este plan es un primer paso para recuperar el orgullo que siempre hemos sentido por nuestra sanidad pública”, justifica Bergerot, que denuncia “un deterioro gradual de la sanidad pública para el provecho de algunos personajes que consideran que la sanidad que pagamos con nuestros impuestos es su gallina de los huevos de oro”, al tiempo que “crecen las listas de espera”.
“Si hoy es legal que el novio de la presidenta se haga millonario por ser el novio de la presidenta, todos sabemos que es inmoral y como tal queremos que se refleje en la ley”, añade.