Unas 200 caravanas toman Palma contra la prohibición de PP y Vox de habitar en ellas ante la falta de vivienda

Haciendo retumbar sus bocinas, los vehículos han recorrido las principales arterias de la capital balear con pancartas que rezaban, entre otros, ‘Aparcar no es acampar. Regular sí, prohibir no’. «No nos pueden prohibir estar el tiempo que queramos dentro de nuestros vehículos», aseveran

Indignación ante la prohibición de PP y Vox de dormir en vehículos en Palma: “Los caravanistas no son terroristas”

Unas 200 caravanas han tomado las calles de Palma para alzar la voz contra la nueva ordenanza de convivencia cívica aprobada inicialmente el pasado 30 de enero por PP y Vox, que prevé multar, con sanciones de entre 750 y 1.500 euros, a quienes utilicen las autocaravanas como viviendas, a pesar de que muchos de quienes duermen en estos vehículos son trabajadores que pernoctan en ellos ante los elevados precios del mercado inmobiliario, atravesado desde hace años por la especulación, la voracidad de los fondos de inversión y la oferta turística ilegal, lo que les impide acceder a un hogar digno para vivir.

Los afectados, convocados por la Asociación de Caravaning Oasis (A.C.O) y la Plataforma Autocaravanas Autónoma (P.A.C.A.), han recorrido las principales calles de la capital balear, custodiados por la Policía Nacional y Local, para protestar contra una normativa que les impide pernoctar en el único lugar que pueden permitirse. Haciendo retumbar sus bocinas, los vehículos han hecho notar su presencia con pancartas que rezaban, entre otros mensajes, ‘Aparcar no es acampar. Regular sí, prohibir no’.

La multitudinaria marcha de caravanas ha provocado el colapso de las principales arterias de la ciudad y ha llevado a las autoridades a llevar a cabo cortes de tráfico y a desviar la circulación a calles aledañas. La protesta ha contado con la autorización de la Delegación del Gobierno.


Uno de los carteles de protesta que colgaban de las caravanas

Antes de la marcha, el presidente de A.C.O, Javier Fuster, ha criticado que la nueva ordenanza es “discriminatoria” y “arbitraria a la ley”, dado que “vulnera los derechos de los caravanistas”. Fuster ha aseverado que en este caso se trata de autocaravanas, “un vehículo homologado por la industria europea y española” y que “dispone de derechos como vehículo vivienda”, ha recordado. “No nos pueden prohibir estar el tiempo que queramos dentro de nuestros vehículos”, ha aseverado, “menos aún”, ha apostillado, cuando en la ciudad hay tres “puntos calientes” de personas que viven en autocaravanas porque “no pueden acceder a la vivienda por los altos precios del alquiler”. Además, ha aclarado que quienes pernoctan en estos vehículos debido a la falta de vivienda no defienden “la acampada en vía pública ni el incivismo”.

Habitar sobre el hormigón no es, sin embargo, un fenómeno nuevo, pero se ha convertido en una alternativa habitacional cada vez más extendida en el archipiélago, donde alquilar una habitación puede llegar a costar más de 700 euros. Según un estudio del portal inmobiliario Idealista publicado el pasado mes de septiembre, hasta 91 personas compiten en la actualidad por cada habitación que se anuncia en Palma. La imposibilidad para arrendar una vivienda ha disparado la demanda de este tipo de espacios. De acuerdo a los datos de Idealista, alquilar un estudio en Palma es hoy hasta un 90% más caro que una habitación en un piso compartido, mientras que, según un reciente estudio de Fotocasa, comprar una vivienda de segunda mano es en la actualidad un 124% más caro que hace 20 años.


La marcha, a su paso por las Avenidas de Palma, principal arteria de la ciudad

No solo eso. Cerca de 250.000 personas, el 20,6% de la población, y uno de cada tres menores de edad (33,3%) de Balears viven en riesgo de pobreza o exclusión social, unas cifras que se han agravado por el incremento del coste de la vida o la dificultad para acceder a una vivienda digna, entre otros factores, tal como consta en el informe sobre el estado de la pobreza de la Xarxa per la Inclusió Social (EAPN), presentado el pasado mes de octubre en el Parlament y que, con datos de 2023, hace una radiografía de los sectores más vulnerables de la sociedad balear y de los factores que influyen en su exclusión con datos, así como una batería de propuestas para tratar de revertir estas situaciones.

Frente a ello, una reciente investigación de elDiario.es arroja que Balears es la séptima Comunidad Autónoma que cuenta con un mayor número de viviendas en manos de grandes tenedores, es decir, de aquellos que poseen más de una decena de inmuebles: en total, 26.061 viviendas, una cifra que supone el 4,53% del parque total del archipiélago, compuesto por 574.813 inmuebles. De todos ellos, 6.672 viviendas pertenecen a propietarios que llegan a poseer más de cien inmuebles.

Entre las nuevas medidas aprobadas por PP y Vox en Palma, el Ajuntament prohibirá acampar en vehículos en el término municipal, excepto en los lugares específicamente habilitados para ello, por lo que las caravanas y autocaravanas solo podrán estacionarse en lugares permitidos y no podrán permanecer en el mismo lugar más de diez días.

Durante la presentación de la nueva ordenanza, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, aclaró que también se restringe el uso de estos vehículos como vivienda con “signos de permanencia” en espacios públicos y las infracciones se considerarán graves, con sanciones de 750 a 1.500 euros. Asimismo, también se habilita a los agentes a proceder a la retirada del vehículo si no se encuentra al responsable del mismo. No obstante, si la infracción la comete una persona en situación de vulnerabilidad social la infracción podría quedar suspendida si dispone de un informe de vulnerabilidad social y sería derivada a Servicios Sociales.

“Entiendo que un vehículo es para desplazarse, una vivienda es otra cosa. Un coche, una caravana o una autocaravana no es para vivir”, respondió Martínez al ser preguntado por los periodistas.

Publicaciones relacionadas