La construcción de un recinto ferial lleva la discordia a Pozuelo: «Generará ruido y más tráfico en una zona residencial»

Los afectados estudian judicializar esta operación que puede llegar a repercutir en una zona protegida ambientalmente mientras que el consistorio asegura que el espacio solo se utilizará para las fiestas patronales y algún evento nocturno en Navidad

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Se mudaron a esta zona de Pozuelo de Alarcón (Comunidad de Madrid), la Avenida de Europa, buscando un remanso de paz y tranquilidad. Disfrutaban de las áreas verdes, incluso de la flora y fauna que les rodeaba. En cambio, el programa electoral del PP local, que gobierna el municipio con mayoría absoluta desde hace lustros, recogía un giro en el destino de la comodidad de estos vecinos.

El ayuntamiento planea levantar un palacio de congresos, un hotel, un parking y un recinto ferial en el que celebrar las fiestas patronales de la localidad con un presupuesto de 12 millones de euros a una distancia que los perjudicados califican de insuficiente. Los afectados ya han recogido más de 6.000 firmas que se oponen a un proyecto que pretenden judicializar y que desde el consistorio aseguran que seguirá adelante.

Javier Cabo lleva 12 años viviendo en la Avenida de Europa y asegura que su casa se encuentra a 200 metros de donde se planea levantar el recinto ferial. El pasado año el enclave ya sirvió como emplazamiento provisional para los festejos, lo que causó una gran incomodidad en el vecindario: “Fueron nueve noches de terror, con macroconciertos en los que cientos de personas bebían alcohol fuera del recinto. Vimos de todo, a menores bebiendo, otras personas consumiendo droga… A partir de entonces nuestra indignación fue a más”.

Este prejubilado, también portavoz de la Asociación de Afectados Recinto Ferial de Pozuelo, recuerda que el ayuntamiento organizó allí una fiesta en Nochevieja a la que acudieron unas 3.000 personas. “Nunca se había hecho algo así y fue todo caótico. Juntaron a menores con mayores de edad, se coló mucha gente, una cosa extrañísima”, comenta. El colectivo sabe que aquella noche se hicieron mediciones de ruido, pero apuntan que el ayuntamiento no quiere dar a conocer esos datos.

La comunidad de vecinos afectada está a unos cuatro kilómetros del núcleo urbano de Pozuelo, un hecho que Cabo recalca para reclamar que “el recinto ferial lo pueden construir en cualquier polígono en el que no moleste a ninguna persona”. El portavoz defiende que han intentado en repetidas ocasiones explicarle su malestar a la alcaldesa, Paloma Tejero, sin éxito. El ayuntamiento, por su parte, responde que ya les ha explicado a los vecinos en repetidas ocasiones en lo que consistirá el proyecto.

Merma de la calidad de vida

Pozuelo es el municipio de la Comunidad de Madrid con las rentas más altas, aunque desde el vecindario afectado subrayan que en su caso se encuadran en la clase media-alta. “Muchos nos hemos comprado una casa aquí haciendo un esfuerzo económico enorme porque nos gustaba la calidad de vida de Pozuelo”, explica Cabo. Parecida es la situación que vive Isabel Hortelano, funcionaria de la Agencia Tributaria cuya casa está a unos 400 metros del recinto. “Mi casa no da al exterior y aun así recuerdo que lo que sucedió el pasado septiembre fue espantoso”, comenta refiriéndose a las fiestas patronales.

Ella es una de las personas que desde que llegó al municipio, hace 31 años, suele disfrutar del parque forestal que está cerca de la zona. “Esto va a suponer un deterioro ambiental espantoso. Se lo van a cargar con los ruidos, el polvo y las luces hasta altas horas de la noche, y eso que es un espacio increíble para avistar aves”, ilustra.

En este sentido, Cabo señala la instalación de una carpa provisional en el recinto ferial, para la que apelmazaron el suelo, como la causa de la caída de gravilla y arena al Arroyo de las Platas que discurre por el lugar y en el que crece el junco churrero, especie protegida. “Esto se trata de un tema político, porque ni la alcaldesa ni muchos concejales ni siquiera viven aquí. Cuando se vayan, habrán levantado un recinto y un palacio de congresos, y nosotros tendremos que soportar las incomodidades que van a acarrear”, sostiene Hortelano.

Un recinto ferial para utilizar dos veces al año

Fuentes municipales han explicado a elDiario.es que la parcela en la que se va a construir tiene la calificación de dotacional desde 2003. También inciden en que se trata de dos parcelas contiguas con proyectos diferentes. Por un lado, el recinto ferial será una construcción totalmente pública. El palacio de congresos, por otro lado, será un proyecto cuya concesión se hará mediante la fórmula público-privada, en donde una empresa externa construirá el edificio y lo explotará.

El ayuntamiento asegura que el recinto ferial tan solo se utilizará para celebrar las fiestas patronales en septiembre “y algún evento puntual en la Navidad con carácter nocturno”. Cualquier otra actividad, han añadido, será “de carácter familiar y diurno”. También aseguran que desconocen si han caído al arroyo algunos materiales utilizados en la construcción de la carpa y que, según sus cálculos, las viviendas más cercanas al recinto se ubican a 500 metros. “Es nuestra parcela más alejada de la ciudad”, apuntillan estas mismas fuentes.

Desde el consistorio pozuelero responden a los vecinos que el recinto “está concebido como una zona verde y de estancia de paseo, como un espacio de disfrute para la ciudadanía”, y que en él “no habrá fiestas constantes”. De la misma forma, admiten que las pasadas fiestas patronales se dieron algunas situaciones, sobre todo ligadas al botellón en las inmediaciones, que intentarán que no se repitan. Asimismo, señalan que no todos los vecinos de la zona se oponen al proyecto. “Hablamos de un municipio de más de 89.000 habitantes y este proyecto va en un programa electoral que votó más del 60% de la población”, subrayan.

Pozuelo como reflejo de Madrid

Enrique Giménez tan solo lleva nueve meses residiendo en la Avenida de Europa, aunque antes estaba en otra zona de Pozuelo, así que se conoce bien la localidad. “Este recinto ferial generará ruido, molestias, incomodidades y un tráfico increíble que es absurdo en una zona residencial como esta”, explica. Este economista de profesión califica de “innecesario” el palacio de congresos proyectado. “Parece que Pozuelo quiere ser Madrid, y eso no puede ser. Estamos a diez minutos de la capital en donde ya existe una oferta increíble de este tipo de espacios. No veo nada positivo en el proyecto que pueda repercutir a los vecinos, como mucho reportará ingresos a una empresa privada”, se explaya.

Este vecino tampoco entiende cómo el ayuntamiento va a invertir 12 millones de euros en una instalación que tendrá dos usos a lo largo del año. “Es todo absurdo, menos mal que cada vez estamos informando a más vecinos y todos con los que yo he hablado coinciden en que es un disparate”, añade.

Giménez expresa que el consistorio les ha ignorado a la hora de tomar esta decisión. “Van a destruir una zona natural para levantar algo que no sabemos si los próximos gobiernos ni siquiera van a utilizar, porque esto ya no tiene marcha atrás, cuando tampoco nos han consultado absolutamente nada a los vecinos afectados”, finaliza.

Próximo paso: judicializar la operación

Algo menos perjudicada estará Fátima Arranz, profesora de la Universidad Complutense de Madrid ya jubilada que reside en Pozuelo desde 1994 y a unos 700 metros del recinto ferial. “La mayoría de gente de esta zona hemos venido aquí porque era un lugar más o menos asequible para las clases medias-altas precisamente huyendo de la vorágine, los ruidos y la contaminación de Madrid”, señala. Recuerda que cuando ella legó al municipio, la diferencia de temperatura con la capital era de dos o tres grados menos en los meses de verano. “Ya no hay diferencia e irá a peor si levantan esto aquí, justo al lado de la continuación de la Casa de Campo”, exclama.

Arranz se queja: “Unos cuantos tendremos que aguantar el ruido mientras otros se llevarán los beneficios”. Sin embargo, desde la asociación de afectados siguen intentando frenar el proyecto. Cabo, su portavoz, determina que los siguientes pasos que darán será entregar las más de 6.000 firmas recogidas en el ayuntamiento al mismo tiempo que tratar el asunto con abogados. “Se ve que no entienden otro idioma, así que quizá comencemos un proceso judicial”, concluye.

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