«El acuerdo consiste en introducir una deducción en la cuota del IRPF que haría que los asalariados que cobran el SMI o menos no tributen el IRPF en 2025», según fuentes del Ministerio de Yolanda Díaz
El Ministerio de Trabajo y el de Hacienda han llegado a un acuerdo para que el salario mínimo no tribute IRPF en 2025. Los equipos negociadores de ambas carteras han sellado un pacto a última hora que implica que esos sueldos quedarán exentos de tributar durante este año. Yolanda Díaz consigue cambiar los planes de María Jesús Montero aunque a cambio cede en sus intenciones de que la medida no se convierta en estructural y se limite a este año. El que viene tendrán que volver a negociar.
“El Ministerio de Hacienda y el Ministerio de Trabajo han alcanzado un acuerdo para que los trabajadores y trabajadoras que cobran el SMI no tributen en el IRPF en 2025. El acuerdo consiste en introducir una deducción en la cuota del IRPF que haría que los asalariados que cobran el SMI o menos no tributen el IRPF en 2025”, han trasladado fuentes de Trabajo.
Las negociaciones se han encauzado este viernes después de que la vicepresidenta segunda del Gobierno acusara a María Jesús Montero de levantarse de la mesa de negociación en la noche del jueves. Hace apenas unos minutos ambos ministerios han sellado un acuerdo cuya concreción se conocerá en las próximas horas.
Este viernes se cumplía el límite legal que tiene el Gobierno para registrar en el Congreso el veto a las propuestas de Sumar, PP y Podemos que buscaban tumbar la decisión adoptada en su día por Hacienda de que este año, tras la nueva revalorización, sí tributaran los receptores del salario mínimo. Al tratarse de una medida que tiene impacto en las cuentas públicas, la Constitución concede al Ejecutivo la potestad de bloquear esas propuestas, aunque desde el martes la idea era llegar a un acuerdo en el seno de la coalición antes de que expire el plazo y así ahorrarse una foto de ruptura complicada de digerir para PSOE y Sumar.
Es lo que han conseguido los equipos negociadores este viernes en el último momento, cuando apenas quedaban unas horas para que venza el límite de ese veto, a las seis de la tarde. El acuerdo ha llegado después de momentos de tensión en las negociaciones, en los que la vicepresidenta segunda del Gobierno llegó a acusar a María Jesús Montero de haberse levantado de la mesa. El punto de conflicto en esas últimas horas había girado precisamente alrededor de si esta medida afectaba únicamente a los salarios de 2025 o se convertía en una medida estructural.