El Supremo de EEUU bloquea el nuevo intento de Trump de usar la ley de enemigos extranjeros para deportar a migrantes

El alto tribunal ha frenado la aplicación de la norma de 1789 para la expulsión de un grupo de migrantes venezolanos retenidos en Texas

El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha bloqueado la reactivación de la ley de enemigos extranjeros para la deportación de un grupo de migrantes venezolanos retenidos en un centro de detención de inmigración en Texas. La administración de Donald Trump quería expulsarlos bajo la aplicación de esta norma de 1789 y que en su momento el alto tribunal frenó en una resolución de emergencia. La decisión del Supremo supone un nuevo revés para el presidente estadounidense y para sus planes de deportaciones masivas.

Trump quería utilizar la ley para acelerar su campaña de deportaciones. La ley de enemigos extranjeros, creada para ser utilizada en un contexto de guerra, permite deportar rápidamente y sin garantías judiciales a aquellas personas a las que se les aplique. En marzo, Trump la invocó para aplicarla a venezolanos y salvadoreños que, bajo la acusación de la administración, supuestamente pertenecen a las bandas criminales El Tren de Aragua y la MS-13. En una orden ejecutiva en enero, el republicano designó a ambas bandas como grupos terroristas y las considera una amenaza para el país, pretexto por el cual recurrió a la ley decimonónica.

Los magistrados del Supremo han enviado el caso de nuevo al tribunal de apelaciones para decidir sobre las cuestiones subyacentes del caso, entre ellas, si la medida del presidente es legal. De los nueve votos del alto tribunal, solo los jueces conservadores Clarence Thomas y Samuel Alito han manifestado públicamente su desacuerdo.

Publicaciones relacionadas