El Gobierno de Pedro Sánchez, que no ha reconocido el proceso electoral venezolano, no acudirá a la toma de posesión de Maduro el próximo 10 de enero. El presidente colombiano, Gustavo Petro, también anuncia que no asistirá a la ceremonia tras las detenciones de defensores de derechos humanos en Venezuela
El opositor Edmundo González denuncia la “desaparición forzada” de su yerno en Venezuela
España no estará presente en la toma de posesión de Nicolás Maduro. El próximo 10 de enero está previsto que asuma la reelección el presidente venezolano, después de las elecciones del pasado 28 de julio, cuyo resultado no ha sido reconocido por España y el resto de países de la UE, en línea con los observadores de Naciones Unidas y la Fundación Carter, por la ausencia de actas electorales que corroboren el pronunciamiento del Centro Nacional Electoral venezolano.
Así, fuentes del ministerio de Exteriores han confirmado este miércoles que no acudirá ningún representante del Gobierno español a la ceremonia de este viernes, en sintonía con la posición común de la UE, que pasa por no reconocer el resultado electoral del 28 de julio pero tampoco la victoria del líder opositor, Edmundo González, a quien sí le han reconocido como presidente electo países como Argentina o EEUU, y resoluciones parlamentarias aprobadas en el Congreso de los Diputados y la Eurocámara, por ejemplo.
Una vez haya asumido la reelección Nicolás Maduro, se espera una reacción de los 27 Estados miembros de la UE a través de un comunicado, más allá de lo que exprese cada Gobierno, en tanto que la política exterior es competencia de cada país, y queda pendiente ver si se ponen o no en marcha sanciones comunitarias como ha ocurrido en el pasado con miembros del Ejecutivo venezolano.
El colombiano Petro tampoco va a Caracas
El presidente colombiano, Gustavo Petro, crítico con el proceso electoral venezolano por la ausencia de datos públicos que ratifiquen los resultados anunciados por el organismo electoral del país, ha counicado este miércoles que no acudirá a la toma de posesión de Maduro a raíz de las detenciones recientes de defensores de derechos humanos en Venezuela.
“Igual que nuestro amigo Enrique Márquez, destacado progresista venezolano, ha sido detenido Carlos Correa, destacado defensor de derechos humanos en Venezuela. Esto, y otros hechos, impide mi asistencia personal al acto de posesión de Nicolás Maduro”, ha dicho Petro en X: “La solicitud de Colombia no fue atendida en el sentido de máxima transparencia en las elecciones pasadas, cuando tal posibilidad se expuso en diversos espacios de encuentro político al que fuimos invitados. En Europa, en Venezuela y en los EEUU. Las elecciones pasadas en Venezuela no fueron libres. No hay elecciones libres bajo bloqueos. […]. Colombia no romperá relaciones diplomáticas con Venezuela, ni intervendrá en los asuntos internos de ese país, sin invitación. Pero solicitamos desde nuestra propia lucha por los derechos humanos en Colombia, se respeten para todos y todas en Venezuela. Las fuerzas progresistas de Colombia mantendrán su relación de colaboración y amistad con todas las fuerzas progresistas de Venezuela en procura de una gran dialogo político y social que lleve a la paz a toda la región y prevenga la violencia. La libertad de los pueblos es el objetivo de cualquier progresismo. No podemos reconocer las elecciones que no fueron libres y esperamos que estas puedan realizarse pronto sin bloqueos ni intimidaciones internas […]. Solicitamos la libertad de todas las personas detenidas por razones políticas”.
España tampoco acudió a la toma de posesión de la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, si bien aquella negativa tuvo que ver con la tensión diplomática por el rechazo del Ejecutivo español y del rey Felipe VI a responder al presidente mexicano anterior, Andrés Manuel López Obrador, quien había solicitado por carta al monarca que España pidiera perdón por las atrocidades cometidas durante la conquista de México.