A última hora de la tarde del martes, en todos los teléfonos de cinco comarcas de Tarragona sonaron las alarmas. Ante la alerta roja decretada por el riesgo de lluvias torrenciales, , aplazar la actividad sanitaria no urgente y prohibir la movilidad entre las 6.00 y las 00 horas. Sobre el papel, quedaba prohibido desplazarse a trabajar excepto en casos de servicios esenciales.