El ex consejero delegado de Globalia asegura que los pagos al supuesto conseguidor, Víctor de Aldama, corresponden a contratos de “prestación de servicios”
Javier Hidalgo, hijo del fundador de Globalia y ex consejero delegado de la compañía, ha comparecido este jueves como testigo ante el juez de la Audiencia Nacional que investiga el ‘caso Koldo’ sobre supuesta corrupción en la compra de material sanitario durante la pandemia con contratos del Ministerio de Transportes y otros organismos públicos. Ante el juez, Hidalgo ha negado que pagara comisiones a la trama por los contratos a los que accedió la compañías del sector del transporte aéreo para traer mascarillas a España durante la pandemia, confirman a elDiario.es fuentes conocedoras del contenido de esas declaraciones.
Hidalgo fue hasta 2021 consejero delegado de Globalia, una de las empresas que se encargó de traer de China a España parte del material sanitario que compraron el Ministerio de Transportes y otros organismos públicos. La documentación que recoge el sumario certifica que Soluciones de Gestión, empresa que está en el epicentro de la trama, contrató a Grupo Globalia para el transporte de mascarillas. Y que, a su vez, MTM 180 CAPITAL S.L. —una de las empresas de Víctor de Aldama, el presunto conseguidor de la trama— recibió pagos de Globalia. Unos pagos que, según los jueces de la Sala de lo Penal, podrían ser “en concepto de comisión”.
Ante el juez, Hidalgo ha negado el pago de mordidas a Aldama, un empresario ajeno al sector de la salud, expresidente de un club de fútbol de tercera división —el Zamora CF— y que se las ingenió para buscar proveedores de mascarillas cuando estalló la crisis sanitaria. El exCEO de Globalia ha asegurado que se contrató a Aldama para que realizara diferentes trabajos de “prestación de servicios”, entre los que ha citado la mediación para la contratación de un hotel en el Caribe o para que negociara la deuda que la aerolínea Air Europa tenía pendiente de cobro con Venezuela. La remuneración era de 10.000 euros al mes.
Respecto a los servicios de transporte realizados por Air Europa, empresa del grupo Globalia, Hidalgo ha explicado que él no estaba en las negociaciones y se ha remitido a dos ex altos cargos de la aerolínea como quienes gestionaron todos los asuntos comerciales y trataron con Aldama.
También ha indicado, según las fuentes consultadas, que los servicios de transporte prestados por Globalia para la empresa de la trama, que ha cuantificado en 18 vuelos tras varios bailes de cifras, no tenían interés económico, sino humanitario, y que incluso los primeros no llegaron a generar beneficio.
La citación de Hidalgo como testigo se ha producido en contra del criterio de la Fiscalía, que consideró que su comparecencia no era “ni útil, ni necesaria” cuando la solicitó Liberum, una de las acusaciones populares personadas en la causa. El juez Moreno rechazó su testifical, pero su decisión fue revertida por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. Los tres magistrados de la Sección Segunda determinaron que la citación del empresario era “útil y pertinente”.