La fanfarria léxica con la que cerramos el año es una buena ocasión para admirar la sofisticación lingüística de la que hacemos gala los hablantes sin apenas darnos cuenta
Llega el final del año y, con él, . Diciembre se ha convertido en una especie de , donde los forofos confirman sus predicciones (), se indignan ante las incorporaciones a deshoras (¡) y se decepcionan ante las ausencias (). Además de un seleccionador de fútbol, parece que todos llevemos dentro un lexicógrafo experto.
el anuncio de las nuevas incorporaciones al diccionario de la RAEgala de los Oscars léxica